jueves, 26 de febrero de 2009


Museo Nacional del Grabado


Entre las actividades que desarrolla el presidente de nuestra institución Julio Herrera se encuentra la de subrrogante de interventor del Museo Nacional del Grabado, hace poco obligado a mudarse de la calle Defensa y hoy ocupando un nuevo espacio cedido por la Biblioteca Nacional.

El Museo fue el primero del mundo en su estilo, según cuenta Irene Perrando, quien junto a su marido el profesor de dibujo Oscar Pécora creó el museo en 1960 a partir de una galería de arte que ya poseían (La Nación, 29/06/2006). Así organizan el Primer Certamen Latinoamericano de Xilografía, ganado por la artista Fayga Ostrower, siendo ésta la primera obra en formar parte del Museo, en principio una iniciativa privada. En 1979 el matrimonio ofrece al estado una donación de 15.000 grabados -donde había obra de Siqueiros, Picasso, Quinquela Martín, Rebuffo, López Anaya, entre otros- y 3.000 libros. Cuatro años más tarde el estado acepta oficialmente dicha donación y se crea el Museo Nacional del Grabado. Durante todos estos años el Museo tuvo diferentes emplazamientos y ahora ocupará un espacio en Agüero 2502, Ciudad de Buenos Aires, en las cercanías de la Biblioteca Nacional, “un lugar privilegiado por la cantidad de atracciones y paseos de la zona”, se entusiasma Herrera.

El patrimonio del Museo incluye prensas antiguas, grabados originales sueltos y en carpetas, ediciones con grabados originales y libros de artistas, como así también una importante colección de matrices, tacos xilográficos, planchas metálicas, piedras litográficas y diversas herramientas de trabajo que pertenecieron a grandes maestros del grabado.

En el Museo asimismo funciona una biblioteca especializada y de arte en general, y una tienda donde pueden adquirirse grabados y otros objetos, también se realizan visitas guiadas y un Taller de Grabado a cargo del Profesor Gustavo Fernández, quien inicia a sus alumnos en las diferentes técnicas de esta forma de impresión manual.

Contiguamente al emplazamiento en Defensa 372, antaño se encontraba la casa de Bernardino Rivadavia, “pero por esas cosas que tenemos los argentinos, ahora funciona una playa de estacionamiento” lamenta Julio.

Luego de las remodelaciones en el nuevo espacio de Agüero 2502, el Museo abriría nuevamente sus puertas en abril de este año.

Próximamente contará con página web.

(Salvo el indicado, los datos fueron sumistrados por la Lic. Alicia Guzmán, Prensa y Difusión, mng_extension@yahoo.com.ar).













Ejemplo de restauración: antes -izquierda-, después -derecha-.

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